PREPARACIÓN
Prácticamente cualquier persona puede hacer una peregrinación a pie siempre y cuando se prepare adecuadamente, siga unas pautas lógicas y mida sus esfuerzos en función de su capacidad. Para ello conviene comenzar realizando un entrenamiento previo, haciendo largos paseos o recorridos de montaña cada vez más largos.
PLANIFICACIÓN
Conviene hacer un plan previo de etapas de la ruta que se quiere hacer, teniendo en cuenta que una distancia de recorrido normal para cada etapa puede ser entre 25 y 30 km. Conviene también escoger una buena época, que variará dependiendo también de la ruta o camino. Si se puede hay que tratar de escapar de los rigores del invierno y del calor del verano. Hay que pensar en iniciar el camino con etapas más cortas y conforme el cuerpo se habitúe a caminar prolongarlas, siempre midiendo las propias fuerzas y actuando en consecuencia. Es importante también informar a los familiares del plan de viaje antes de partir y durante el recorrido.